viernes, 29 de abril de 2011

Una cuarta parte de los diabéticos es además celíaco

Un tercio de los niños con diabetes tipo 1 tiene signos de otros trastornos inmunológicos, entre los que destaca la celiaquía, cuando se les diagnostica la diabetes, según concluye un nuevo estudio que pone de relieve la importancia de controlar otros síntomas en estos chicos. La diabetes tipo 1 es una enfermedad por la cual el sistema inmunológico destruye las células del páncreas productoras de la insulina, la hormona reguladora del azúcar en sangre. El estudio concluye que los diabéticos tipo 1 tienen también tasas más altas que la población general de otros trastornos inmunológicos, como la celiaquía, la enfermedad de tiroides y la enfermedad de Addison, que afecta las glándulas adrenales.

En este nuevo estudio, los autores buscaron la frecuencia de los signos de esos tres trastornos en niños al momento de diagnosticarles diabetes 1. Para eso, les midieron los niveles en sangre de ciertos "autoanticuerpos" que son marcadores de esas enfermedades.

Los resultados ofrecieron que uno de cada ocho niños tratados tenía anticuerpos asociados con la enfermedad celíaca, mientras un cuarto de ellos padecía la enfermedad.

Por su parte, un cuarto de los 491 niños estudiados tenía autoanticuerpos asociados con problemas de tiroides y uno de cada ocho presentaba la enfermedad; mientras el 1 % del grupo tenía anticuerpos contra la enfermedad de Addison y uno portaba la enfermedad.

El hecho de que un tercio tuviera signos de otras enfermedades autoinmunes significa que padres y médicos deberían prestar atención a esos tres trastornos en los niños diabéticos, opina la doctora Jennifer M. Barker, de la University of Colorado en Denver, que dirigió el estudio.

Pero existen dudas sobre el uso de los análisis de autoanticuerpos para identificar las enfermedades, advirtió Barker. Por ahora, dijo, la Asociación Estadounidense de Diabetes recomienda diagnosticar la enfermedad de tiroides y la celiaquía al momento de diagnosticar diabetes tipo 1 en niños. A partir de ahí, la pesquisa de tiroides debe ser anual y la de la enfermedad celíaca, sólo debe realizarse si hay síntomas.

La detección de la enfermedad celíaca se realiza con un test de anticuerpos y se puede realizar un análisis de sangre para medir los niveles de la hormona estimulante de la tiroides. Pero Barker aclaró: "La presencia de autoanticuerpos no significa necesariamente que un niño desarrollará la condición".

lunes, 25 de abril de 2011

LAS VITAMINAS PODRÍAN AYUDAR AL MANEJO DE LA ENFERMEDAD CELIACA

La suplementación diaria con vitaminas del complejo B pueden mejorar la salud general de las personas con enfermedad celíaca al reducir los niveles de aminoácidos ligados a enfermedades cardíacas, según un nuevo estudio holandés.
Un estudio con 51 adultos con enfermedad celiaca y 50 controles sanos encontró que las personas que toman suplementos diarios de vitamina B6, ácido fólico y vitamina B12 presentaban niveles significativamente más bajos del aminoácido homocisteína, de acuerdo a las conclusiones publicadas en el World Journal of Gastroenterology.

Los estudios epidemiológicos han informado de que el aumento de los niveles de homocisteína en sangre pueden aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares (ECV). Se ha sugerido que reduciendo los niveles de homocisteína en la sangre con vitaminas del complejo B, la gente podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. 
"Este estudio demostró que los pacientes con enfermedad celiaca utilizando suplementos de vitamina B tenían niveles de homocisteína más bajos que los que no utilizaban suplementos", dijo uno de los autores de la investigación dirigida por Muhammed Hadithi de VUmc Centro Médico de la Universidad de Amsterdam.

"En segundo lugar, incluso si persiste la atrofia de las vellosidades, los suplementos de vitamina B pueden  normalizar los niveles de B6, ácido fólico, B12, y los niveles de homocisteína”. 
En las personas con enfermedad celiaca, una intolerancia al gluten de trigo, se informó de un mayor riesgo de tener altos niveles del aminoácido homocisteína.
La enfermedad celíaca, es una condición que afecta hasta el 1 por ciento de los niños y 1,2 por ciento de los adultos, según un estudio en el BMJ de la revista Gut. Debido a que la enfermedad celíaca es un ejemplo típico de un síndrome de malabsorción, los que la padecen tienen un mayor riesgo de deficiencia de diversos nutrientes, entre ellos ácido fólico y vitamina B12, dijo uno de los investigadores. Por otra parte, niveles altos de homocisteína, o hiperhomocisteinemia, son significativamente más frecuentes en los pacientes con enfermedad celíaca que en los controles sanos.
Detalles del estudio 
Hadithi y sus colaboradores reclutaron a 51 personas con enfermedad celíaca y los compararon con 50 personas sanas. Los pacientes con enfermedad celíaca que utilizaron suplementos vitamínicos tuvieron los mayores niveles séricos de las tres vitaminas del complejo B, dijeron los investigadores, en comparación con los no usuarios.

Además, los niveles de homocisteína fueron significativamente inferiores en los pacientes con suplementos vitamínicos que en pacientes que no recibieron suplementos o controles sanos. Y mientras que la B6 y ácido fólico fueron significativamente e independientemente asociados con los niveles de homocisteína, no se observó esta asociación con la B12.
 
"Las consecuencias del aumento de los niveles de homocisteína en la enfermedad celiaca pueden inducir a una mayor tendencia a desarrollar trombosis venosas y enfermedades arteriales oclusivas", escribieron los investigadores. "Si bien esta ha sido un área poco estudiada, están surgiendo datos que la enfermedad celiaca confiere un mayor riesgo de complicaciones vasculares". 
World Journal of Gastroenterology 2009, Volume 15, Issue 8, Pages 955-960
“Effect of B vitamin supplementation on plasma homocysteine levels in celiac disease”
Authors: M. Hadithi, C.J.J. Mulder, F. Stam, J. Azizi, J.B.A. Crusius, A.S. Pena, C.D.A. Stehouwer, Y.M. Smulders
  

Fuente: Nutraingredients.com Europe

viernes, 22 de abril de 2011

Enfermedad celiaca refractaria

Fuente: celiaconline.org

La enfermedad celíaca es la causa más frecuente de atrofia de las vellosidades intestinales y se debe a la intolerancia al gluten de la dieta en pacientes genéticamente predispuestos. Una vez realizado el diagnóstico, la instauración de una dieta sin gluten, mejora la clínica del paciente en un breve período como ya se ha comentado anteriormente. Sin embargo, en un 5% a 30% de las personas esta mejoría no sucede tras la iniciar el tratamiento, considerándose una reacción atípica que se denomina enfermedad celíaca refractaria.
El primer paso a seguir con este subgrupo de pacientes es determinar si el diagnóstico de enfermedad celíaca es el correcto, pues existen otros procesos, como el sprue tropical o la enteropatía autoinmune, que cursan con atrofia de las vellosidades, pero en los que los pacientes no se benefician de una dieta sin gluten.
En segundo lugar, se debe confirmar que el paciente realiza el tratamiento correctamente, sin incluir ningún alimento en la dieta que contenga gluten. Hasta el 50% de los pacientes, sobre todo en las etapas iniciales de la enfermedad, no cumplen fielmente la dieta, sin conseguir remisión clínica de la enfermedad. La presencia de anticuerpos circulantes en sangre es la forma más veraz de confirmar este hecho. Es recomendable un consejo dietético realizado y un seguimiento estrecho realizado por el dietista.
La pérdida de peso, la presencia de dolor abdominal, fiebre y sudoración nocturna pueden alertar sobre el desarrollo de un linfoma intestinal, condición asociada a la enfermedad celíaca. En estos casos, se debe realizar el estudio correspondiente que incluye el scanner de tórax y abdomen y técnicas de empleo reciente como la video-cápsula endoscópica. Se han descrito pacientes con enfermedad celíaca sin respuesta adecuada al tratamiento debido al desarrollo de un adenocarcinoma en el intestino.

Diagnóstico y tratamiento
El diagnóstico final de enfermedad celíaca refractaria se basa en la exclusión de los procesos descritos. Las personas que la padecen se caracterizan por desarrollar enfermedades autoinmunes, infecciosas así como por la elevada incidencia de complicaciones tromboembólicas.
A diferencia de los pacientes con enfermedad celíaca clásica, el pronóstico de las personas que padecen esta variante es notablemente peor, con una supervivencia media del 50% a los 5 años del diagnóstico. La causa más frecuente de muerte en este subgrupo es el desarrollo de procesos neoformativos, como el linfoma intestinal y la presencia de infecciones comcomitantes.
Por el momento, se desconoce si los avances diagnósticos, (como el empleo de la video-cápsula endoscópica) puede suponer una mejoría futura del pronóstico de los pacientes con enfermedad celíaca refractaria, mediante la realización de un diagnóstico más precoz que el realizado hasta hace unos años, con las técnicas disponibles.
El abordaje inicial se basa en la mejora del estado nutricional, recurriendo si es necesario a la administración de nutrición parenteral. También se recomienda a los pacientes que ingieran una dieta libre de gluten durante un período de un año. Una alimentación rica en oligopéptidos ha demostrado proporcionar una mejoría de la enfermedad, pero en la actualidad los pacientes no toleran la nutrición con una dieta de este tipo a largo plazo y se requieren más estudios para poder solucionar este problema. Los corticoides forman parte del arsenal terapéutico de esta enfermedad, siendo eficaces para conseguir la remisión clínica.
En el futuro, el empleo de anticuerpos monoclonales parece ser un tratamiento prometedor, aunque son necesarios estudios que aporten nuevos datos para mejorar el pronóstico infausto.

Los medicamentos para la enfermedad inflamatoria del intestino podría ayudar en la enfermedad celíaca refractaria

Un medicamento que se usa para las enfermedades inflamatorias intestinales, como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, podría ayudar en algunos casos de la enfermedad celíaca refractaria según un nuevo estudio realizado.
La enfermedad celíaca refractaria se produce cuando el intestino no se logra curar, incluso cuando se está realizando y siguiendo una dieta sin contenido de gluten.
En muchos casos, las personas que presenten signos de enfermedad celíaca refractaria está comiendo pequeñas cantidades de gluten, que causa sus síntomas de continuar y la curación se retrasa. La eliminación de todos los productos de granos (que a menudo puede estar contaminado), cayendo comidas en restaurantes y evitar todos los alimentos procesados a menudo se puede lograr la curación en estos casos.
Sin embargo, algunas personas no parecen sanar a todos los que la padecen, y los médicos tienen pocas opciones para ellos. El fármaco estudiado, mesalamina, pequeña liberación intestinal Sirm), puede ofrecer una nueva opción.
En el estudio, publicado en el Journal of Clinical Gastroenterology, los investigadores observaron a 10 pacientes con diagnóstico de enfermedad celíaca refractaria. Cuatro de ellas fueron tratadas con Sirm solo, mientras que otros seis recibieron Sirm y budesonida oral, otro fármaco que ha mostrado cierta probabilidad en el tratamiento de la enfermedad celíaca refractaria.
Dentro de cuatro semanas, la mitad de los pacientes notaron que los síntomas se resolvían por completo, mientras que los otros pacientes vieron que los síntomas mejoran al menos en un 50%. Dos de estos seis pacientes fueron capaces de interrumpir su budesonida, mientras que un paciente suspendió Sirm debido a los dolores de cabeza que sufría. Sin embargo, cuatro de los pacientes con enfermedad celíaca refractaria no respondieron en absoluto a la medicación.
Los autores concluyeron que Sirm parece ser segura y efectiva en pacientes con enfermedad celíaca refractaria, y que las grandes pruebas del medicamento en este grupo de pacientes están garantizados.

Cereales aptos para celíacos, un proyecto español

Un grupo de científicos españoles ha logrado neutralizar la proteína que causa dicha intolerancia.
El número de celíacos ha aumentado en los últimos años y los expertos en medicina aseguran que esta tendencia continuará en crecimiento.
Muchas veces ocurre que los alimentos para celíacos no son muy ricos y, además, pierden algunas de sus propiedades nutricionales. Además, los alimentos sin gluten suelen ser más caros que los que si lo contienen.
Por ello, investigadores del Instituto de Agricultura Sostenible (IAS)  están trabajando en un proyecto que tiene como objetivo desarrollar variedades de trigo y otros cereales que sean aptos para celíacos.
El gluten representa el 80% de las proteínas de trigo y su función es dar elasticidad a la masa de harina y otorgarle su consistencia al pan.
Los celíacos no pueden consumir gluten debido a que esta sustancia destruye las vellosidades del intestino, provocando que haya una disminución de la absorción a nivel intestinal de los nutrientes y, en consecuencia, que la persona sufra problemas de nutrición. Además, algunos síntomas de la Celiaquía están relacionados con trastornos de comportamiento como la apatía o la irritabilidad, sobre todo en los niños.
Además de los alimentos desarrollados especialmente sin gluten, los celíacos pueden comer muchos otros que no poseen esta proteína de forma natural. Entre ellos se encuentran Leche y derivados lácteos (queso, mantequilla, requesón, nata), carne, pescado y mariscos frescos, huevos, frutas, verduras, hortalizas y legumbres (frijoles, arvejas, lentejas, soja), arroz, maíz y tapioca (harina y almidón), azúcar, miel, aceite, margarina, sal, vinagre, pimienta, levaduras sin gluten, colorantes, café y te natural (no instantáneos), hierbas aromáticas (manzanilla, poleo, hierba luisa) y las bebidas carbónicas.

martes, 19 de abril de 2011

Una dieta libre de gluten ayuda a mejorar tu salud

El gluten es una proteína encontrada en trigo, cebada y centeno, y en un sinnúmero de productos alimenticios como el pan y la pasta, que contienen estos granos. Gradualmente daña los intestinos de las personas con enfermedad celiaca; evita la absorción de vitaminas y minerales y desencadena una serie de problemas de salud relacionados, que pueden incluir fatiga y daños en la piel, explica Health.com.

Cooper resultó negativa para le enfermedad celiaca, pero el médico le recomendó probar con una dieta libre de gluten, de cualquier modo. "En una semana tras eliminar el gluten, me empecé a sentir marcadamente mejor", dijo Cooper, ahora de 36 años, a Health.com. "No fue un proceso gradual; fue (inmediato) casi como cruzar una calle". La mayoría de los médicos se ha dado cuenta de que algunas personas que no tienen enfermedad celiaca pueden beneficiarse de las dietas libres de (o bajas en) gluten.

De hecho, los expertos ahora creen que la enfermedad celiaca representa solamente un extremo del amplio espectro de la intolerancia al gluten que incluye a millones de personas con menos severas - pero problemáticas - reacciones a esa proteína, señaló el portal. Aunque la enfermedad celiaca afecta a aproximadamente al 1% de la población, los expertos estiman que alrededor de 10% tiene una condición relacionada y pobremente comprendida conocida como intolerancia al gluten no celiaca (NCGI, por sus siglas en inglés) o sensibilidad al gluten.

La intolerancia al gluten de cualquier tipo - incluyendo a la enfermedad celiaca - a menudo no es diagnosticada o es mal diagnosticada debido a que se manifiesta en muchos y confusos modos que pueden desconcertar a los médicos, señala Health.com. Las personas con la enfermedad celiaca y sensibilidad al gluten usualmente sufren de dolores de estómago, gases y diarrea, al igual que las personas que sufren del síndrome de colon irritable.

Los pacientes celiacos también pueden desarrollar dolores de cabeza, hormigueos, fatiga, dolor muscular, erupciones cutáneas, dolor en las articulaciones y otros síntomas, debido a que el ataque autoinmune a la raíz de la enfermedad gradualmente erosiona las paredes del intestino, provocando una baja absorción de hierro, ácido fólico y otros nutrientes que afectan todo, desde la energía hasta la función cerebral, explica Health.com.

Las personas con sensibilidad al gluten algunas veces experimentan estos síntomas también, aunque es menos clara la causa.

La enfermedad celiaca puede ser diagnosticada usando un proceso de dos pasos: Los médicos analizan la sangre de los pacientes para detectar la presencia de anticuerpos atacantes del intestino que se activan con el gluten, y, si estos análisis resultan positivos, ordenan una biopsia (o una serie de biopsias) para buscar daños intestinales; cualquier evidencia de ella confirma el diagnóstico, indica Health.com.

La sensibilidad al gluten, por el otro lado, es un área gris que "carece de cualquier análisis médico definitivo", dice Daniel Leffler, médico y profesor asistente de medicina en la Universidad de Harvard. La gente que está en este grupo, exhibe los síntomas clásicos de la enfermedad celiaca pero no tiene daño intestinal detectable, y sus análisis resultan negativos para ciertos anticuerpos clave.

¿Qué cantidad de gluten es la correcta?

Las personas con enfermedad celiaca deben comprometerse a llevar una dieta absolutamente libre de gluten, ya que comer la proteína puede, con el paso del tiempo, aumentar el riesgo de la persona de osteoporosis, infertilidad y ciertos tipos de cáncer, además de empeorar los síntomas a corto plazo, señala Health.

Algunos expertos dicen que las personas en el extremo menos severo deben sentirse cómodos comiendo todo el gluten que puedan manejar sin sentirse enfermos.

Libre de gluten no significa 'saludable'

Si sospechas que tu cuerpo no puede tolerar el gluten, lo primero que debes hacer es examinarte por enfermedad celiaca. Si el resultado es negativo, intenta con una dieta libre de gluten durante una semana para ver si te sientes mejor, aconseja Leffler. Cortar el gluten es la forma más confiable de determinar si eres, en efecto, sensitivo a esa proteína. Y si eres sensible, es el único tratamiento, señala Health.

Sin embargo, Leffler enfatiza que debes conseguir ayuda de un nutriólogo para asegurarte de evitar las fuentes ocultas de gluten (como la salsa de soya o los aderezos de ensalada), y que no pierdas las vitaminas que proveen los productos de trigo. Aunque se dice que celebridades como Oprah Winfrey y Gwyneth Patrow han dejado el gluten para 'desintoxicarse', no existe nada inherente a la salud en una dieta libre de gluten, señala Health.

Si planeas eliminar el gluten de tu dieta, selecciona más frutas y vegetales, carne magra, y granos naturalmente libres de gluten como el arroz integral, quinua, alforfón, en lugar de simplemente comprar los productos preempacados etiquetados como 'libres de gluten', indica Dee Sandquist, una dietista registrada y portavoz de la Asociación Dietética Americana.

jueves, 14 de abril de 2011

Etiquetado más seguro para alérgenos


Una información clara sobre el uso de sustancias alergénicas en alimentos es clave para evitar reacciones adversas
  • Autor: Por MAITE PELAYO
  • Fecha de publicación: 7 de abril de 2011


Las personas con alergia están protegidas por ley con una directiva que incluye un listado con los 14 alérgenos alimentarios que desencadenan la mayor parte de las reacciones. Según las condiciones de la normativa, es obligatorio indicar en la etiqueta de los alimentos los grupos responsables de la mayoría de las alergias en la población. Por motivos de seguridad en su consumo, estos alérgenos deben declararse de manera obligada en la etiqueta o identificación del producto.

- Imagen: Shannon -


Los 14 alérgenos que deben citarse de forma obligatoria en las etiquetas cada vez que se usen en la fabricación de un producto se clasifican en alimentos de origen vegetal y de origen animal. Los primeros incluyen cereales con gluten, como trigo, centeno, cebada, avena, espelta (variedad de trigo de grano más tostado), kamut (una variedad de trigo que, para algunos, es la más antigua y de la cual procede el resto) o sus variedades híbridas y sus productos derivados. Hay algunas excepciones, muy utilizadas en la industria, como jarabes de glucosa a base de trigo, incluida la dextrosa, maltodextrinas de trigo y jarabes de glucosa obtenidos de la cebada por la "rotura" (hidrólisis enzimática) de alimentos ricos en almidón. También son una excepción al etiquetado obligatorio los cereales utilizados para elaborar destilados o alcohol etílico de origen agrícola para bebidas alcohólicas, pese a que en ocasiones la harina de estos cereales desencadena el denominado asma del panadero, una reacción alérgica provocada por su inhalación.

Los cereales, amplia presencia

Además de los clásicos alimentos derivados de los cereales -pasta, galletas, pan o bollería-, algunos como el trigo se emplean en gran cantidad y variedad de alimentos, de ahí que las personas celíacas (intolerantes permanentes al gluten), entre otras, tengan que extremar las precauciones cuando consumen alimentos, ya que deben evitar esta proteína. Con el fin de conocer las cantidades de gluten que contienen los productos alimenticios destinados a los celíacos, el Reglamento (CE) Nº 41/2009, de enero de 2009, estableció que en los productos alimenticios elaborados para personas con intolerancia al gluten puede destacarse el término "exento de gluten" si el contenido no sobrepasa 20 mg/kg en total y el término "contenido muy reducido en gluten", si no supera 100 mg/kg en total, medidos ambos en los alimentos tal y como se venden al consumidor final.
Este Reglamento empezará a aplicarse a partir del 1 de enero de 2012. Por su parte, la Federación Española de Asociaciones de Celíacos de España (FACE) elabora y actualiza productos alimentarios libres de gluten y ha creado un distintivo o Marca de Garantía "Controlado por FACE" para calificar los productos que contienen gluten y, por tanto, pueden consumir los celíacos.

Otros alérgenos de origen vegetal

Frutos secos, soja, verduras y hortalizas o mostaza son algunos de los alimentos de origen vegetal que forman parte de la lista de los 14 principales alérgenos
Los cacahuetes y productos derivados son los responsables, en ocasiones, del denominado "shock anafiláctico", una severa reacción a la sustancia desencadenante, que provoca una resistencia aguda y multiorgánica relacionada con la inflamación de los tejidos y la alteración cardiovascular y respiratoria. Una pequeña cantidad de sustancia puede desencadenar el shock y poner en peligro la vida de las personas, por lo que en éste u otros casos se advierte en los alimentos de la posible presencia de trazas (vestigios) del producto, cuando hay posibilidad de que el alimento no esté totalmente libre de la sustancia alergénica.
La soja y productos derivados, excepto aceite y grasa de semilla de soja refinados, tocoferoles naturales mezclados (E306), fitosteroles y esteres derivados también deben citarse en las etiquetas cuando el producto los contenga. Los alérgicos a esta leguminosa, muy rica en proteínas, pueden serlo a la vez a otras como cacahuetes o guisantes. En el grupo de las leguminosas figuran los altramuces, otro gran grupo de alimento alergénico, aunque no se consumen mucho en España.
De obligada mención son los frutos de cáscara como almendras (que causan el mayor número de reacciones alérgicas), avellanas, nueces, anacardos, pacanas, castañas de Pará, pistachos, macadamias o nueces de Australia y productos derivados, salvo las nueces utilizadas para hacer destilados o alcohol etílico de origen agrícola para bebidas alcohólicas.
Las verduras y hortalizas son, junto con las frutas, otro de los grupos alergénicos de alimentos en países mediterráneos. Entre ellas destaca, por su incidencia, el apio, una planta umbelífera con capacidad para causar reacciones anafilácticas. Otro alimento que causa alergia es la mostaza, una semilla de plantas crucíferas que se usa como condimento alimentario y que puede favorecer reacciones alérgicas violentas. Por último, también son de obligado etiquetado los granos de sésamo, una planta oleaginosa (rica en aceites) usada como condimento y con fines decorativos.

Alérgenos de origen animal

Los crustáceos son un grupo de especies animales con un cuerpo recubierto por un caparazón duro, que los protege y que tiene la cualidad de modificarse a medida que el animal crece y se desarrolla. Se clasifican en dos grandes grupos: los de cuerpo alargado -como el bogavante, langosta o langostino- y los de cuerpo corto -como centollo, buey o nécora-. Junto con los moluscos, constituyen un grupo muy alergénico de alimentos. Las personas muy sensibles pueden incluso desarrollar los síntomas alérgicos al inhalar los vapores de su cocción.
El huevo de gallina tiene al menos cinco componentes principales que pueden causar alergia, la mayoría en la clara, y es un alérgeno oculto en múltiples alimentos elaborados. Puesto que en el desarrollo y elaboración de algunas vacunas se utiliza el huevo, éstas pueden causar reacciones alérgicas a ciertos pacientes.
El pescado y derivados, salvo la gelatina de pescado utilizada como soporte de vitaminas o la usada como clarificante en la cerveza y el vino, también deben formar parte de los ingredientes de las etiquetas. La alergia a pescados es muy frecuente tanto en niños como en adultos. Resulta más habitual con pescados blancos, sobre todo bacalao, gallo, lenguado y merluza. Entre los azules, destacan la sardina, el boquerón y el atún. Las personas alérgicas al pescado sufren a menudo síntomas al inhalar humos durante su fritura o cocción. Los pescados, así como los moluscos cefalópodos, pueden estar parasitados por el nematodo anisakis, cuyas proteínas pueden desencadenar reacciones alérgicas, incluso desactivados.
La leche y sus derivados (incluida la lactosa) se citan en la etiqueta, salvo el lactosuero utilizado para hacer destilados o alcohol etílico de origen agrícola para bebidas alcohólicas y el lactitol, un edulcorante artificial. La alergia a las proteínas de leche de vaca, conocida como APLV, se desarrolla en general en la primera infancia, al sustituir o complementar la lactancia materna con leches comerciales de fórmulas adaptadas, basadas en proteínas de leche de vaca. En general, la APLV es transitoria y la tolerancia se desarrolla con la edad. No hay que confundir la APLV con la intolerancia a la lactosa, un trastorno distinto de la infancia, caracterizado sobre todo por diarrea crónica.
Los moluscos y productos derivados constituyen, junto con los crustáceos, un importante grupo responsable de alergias alimentarias (se calcula que en España un 8% de los casos de alergia en adultos están originados por los mariscos). Se ha estudiado la distribución de las poblaciones alérgicas a este alimento y se ha comprobado que la mayor prevalencia se registra entre quienes consumen marisco de forma habitual en la dieta, es decir, sobre todo en poblaciones costeras. Resulta curioso que los alimentos más alergénicos para los diferentes grupos poblaciones son los más frecuentes en la dieta y con los cuales se ha tenido mayor contacto.
El dióxido de azufre y sulfitos son sustancias químicas que deben figurar en la etiqueta del producto en concentraciones superiores a 10 mg/kg o 10 mg/litro, expresado como SO2. Su uso en alimentos y bebidas está justificado como aditivo conservante por su efecto antimicrobiano y antioxidante. En el caso del vino, debe advertirse de forma obligatoria.

ALERGIA E INTOLERANCIA

La alergia alimentaria es una reacción adversa a un alimento, que afecta al sistema inmunitario y causa una reacción anormal minutos o pocas horas después de la ingestión de la sustancia alérgena que contiene el alimento. En determinados individuos sensibles, los síntomas en ocasiones son muy graves. La intolerancia, en cambio, es una reacción adversa a un alimento en el que, a diferencia de la alergia, el sistema inmunológico no se involucra y no se pone en riesgo la vida de la persona, pero sí puede afectar a su salud de forma crónica.
La Federación Española de Hostelería (FEHR), en colaboración con la Federación Española de Asociaciones de Celíacos de España (FACE) y la Asociación Española de Alérgicos a Alimentos y Látex (AEPNAA), ha editado material didáctico sobre las alergias e intolerancias alimentarias. Su objetivo es instruir a los integrantes de empresas relacionadas con el mundo de la restauración, (restaurantes, colegios, comedores de empresa) para ofrecer un servicio acorde a las necesidades de las personas con algún tipo de alergia o intolerancia, un grupo cada vez más numeroso que precisa de mecanismos que garanticen la seguridad de los alimentos que consume.

martes, 12 de abril de 2011

Una ayuda en el teléfono móvil para los celiacos

  • Un 'software' ayuda a elegir alimentos o restaurantes para estos pacientes
  • Aunque aún está en desarrollo, más de 5.000 personas ya la están usando
Consultar la lista de alimentos aptos para celiacos, elegir un restaurante con menús sin gluten o actualizar la información disponible sobre la enfermedad. Eso es lo que ofrece mobiCeliac, una aplicación para móviles que han desarrollado un grupo de profesores de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), junto con la Asociación de Celiacos de Madrid (ACM) y la empresa de software Equalter.
Un móvil con la aplicación. |Foto: El MundoAunque todavía está en desarrollo, más de 5.000 personas se han descargado ya esta aplicación gratuita compatible con PDA, tablets y teléfonos de última generación. [Puede obtenerse en la web www.mobiceliac.com en versiones en castellano, catalán e inglés.]
De momento, en mobiCeliac están disponibles los 2.500 productos certificados por la marca de garantía ‘Controlado por FACE’ -un sello que asegura la idoneidad del producto para esta población-, aunque sus creadores están en contacto con distintas asociaciones para ampliar la información ofertada.
Un móvil con la aplicación. |Foto: El Mundo
"Probablemente en unos días se podrá consultar la lista completa de alimentos", explica a ELMUNDO.es Ángel Fernández, profesor de la Universidad de Alcalá de Henares y 'padre' de la aplicación.
Fernández, que tiene un hijo celiaco, empezó a trabajar en esta tecnología en 2006, después de constatar que existía una necesidad clara de contar con la información de los productos sin gluten de una forma sencilla, rápida y actualizada; por ejemplo, si surgen dudas a la hora de ir al supermercado.

Al alcance de un clic

Quienes padecen la enfermedad celiaca tienen una intolerancia permanente al gluten, una proteína propia de cereales como el trigo, la cebada, la avena o el centeno que, en la práctica, está presente en más del 80% de los productos manufacturados que se venden en el mercado.
El único tratamiento conocido contra la enfermedad es llevar una dieta estricta exenta de gluten, por lo que, para un celiaco, el control de la información nutricional de los alimentos es fundamental.
Hasta la fecha, la Federación de Asociaciones de Celiacos de España (FACE) editaba una guía en papel con todos los productos calificados como 'aptos' para celiacos, pero no podía consultarse de forma on-line, ni mucho menos a través del teléfono.
La nueva aplicación, explica Fernández, permite acceder a esta lista desde cualquier parte y a través de un buscador, por lo que el proceso de localización de un producto resulta sencillo y rápido. Gracias a su versatilidad, ya se han interesado por ella asociaciones de celiacos de otros países, como el Reino Unido.
"Es una herramienta muy útil", señala a ELMUNDO.es Manuela Márquez, presidenta de la Asociación de Celiacos de Madrid, que ha supervisado el proceso y ha cotejado que toda la información disponible sea fiable.
"Permite obtener la información de una manera muy ágil, lo que facilita mucho la búsqueda de alimentos que tiene que realizar un celiaco", añade Márquez, que recuerda que los datos se actualizan de forma periódica utilizando la misma aplicación.
Además de la lista de alimentos, en mobiCeliac también está disponible información sobre la enfermedad y referencias a hoteles y restaurantes que ofrecen menús aptos para celiacos. Por el momento, sólo se incluyen detalles sobre locales del área de Madrid, pero los creadores también están trabajando en la ampliación de estos datos.
Tal y como señalan Márquez y Fernández, es posible que en el futuro se desarrollen varias versiones de la aplicación –una más básica y otra más completa, con extras por los que sí podrían cobrarse pequeñas cantidades -, aunque aún no se ha decidido nada definitivo al respecto.
La enfermedad celíaca es el trastorno crónico intestinal más común. Se calcula que afecta al 1% de la población –en España hay unas 45.000 familias afectadas-, aunque sólo el 10% de los casos está diagnosticado.

lunes, 4 de abril de 2011

El pan sin gluten tiene un IVA superior al del pan común

El pan sin gluten tributa al 8% de IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido), mientras que el pan común tributa al 4%.
El hecho de que un pan deje de tener gluten en su composición pueda derivar en una mayor carga tributaria me hace pensar en que los legisladores no conocen el problema de los celíacos y la necesidad de seguir una dieta estricta libre de gluten.
Equiparan el pan sin gluten a los productos de dietas especiales más o menos voluntarias, como la gente que decide comer productos ecológicos por convicción, pero que no tienen “obligación” o necesidad, es decir que podrían elegir otro pan. En el caso de los celíacos no existe alternativa ya que deben seguir una dieta estricta sin gluten durante toda su vida, esto no puede suponer una penalización tributaria, bien al contrario debería generar algún tipo de ayudas por parte de la administración para compensar el coste adicional de la cesta de la compra de productos sin gluten, en general mucho más caros que los productos convencionales (con gluten).

Hay países como en Italia donde existen ayudas económicas para familias celíacas, en España algunas comunidades autónomas ofrecen alguna pequeña ayuda también, aunque no hay nada a nivel estatal para compensar los 1.500€ adicionales  que supone al año la cesta de la compra de un celíaco. El pan es un producto básico dentro de  la dieta mediterránea, se considera un producto de primera necesidad. Lo es más en el caso del celíaco, que no tiene alternativa a comprar un pan más caro de lo normal por la ausencia de economías de escala de la producción tan limitada. Si a eso añadimos una mayor carga fiscal, es como dar la puntilla; no te ayudo y encima te cobro más que al resto.
Se han creado algunos grupos de protesta en Facebook ante esta injusticia flagrante, La Federación de Celíacos de Andalucía remitió un escrito en Junio de 2010 al Ministerio de Economía y Hacienda. La respuesta del ministerio es impresentable, con un desconocimiento del tema asombroso, hablando de “pan común” y de “pan especial”, como si el celíaco tuviera elección. Podéis ver el escrito de respuesta aquí.
Creo que la FACE debería tomar acciones legales de forma unívoca, en estas cosas la unión hace la fuerza.
Ser celíaco no puede ser motivo de discriminación, tal como consagra la Constitución Española en su artículo 14: “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.